Nace Gestión y Cuidados Surai, SLL

Lo primero de todo que hicimos, fue buscarnos un nombre propio. Algo que describiera lo íbamos a hacer. Y un nombre que nos identificara, hasta tal punto, que SURAI, eran las iniciales de nuestros nombres.


Y Gestión y Cuidados porque íbamos a cuidar a personas y hacer gestiones administrativas que las familias no pudieran hacer, y nos las encargaran a nosotras.


Teníamos hasta sintonía,... todo era ilusión. Y ganas de empezar... pues empezamos por registrar el nombre en el Registro Mercantil, no fuera a ser que alguien tuviera la misma idea que nosotras.


Y empezamos a cumplimentar los datos del Plan de Empresa, lugar de actuación: Mairena del Aljarafe....


Con la información que habíamos conseguido de internet (quien dice que Google no es una herramienta de trabajo, hay que saber buscar información de fuentes fiables), nos fuimos a la Ventanilla Única Empresarial, para informarnos de las ayudas y subvenciones a las que podíamos acceder, ya que la forma jurídica la teníamos decidida, S.L.L. (Sociedad Limitada Laboral), y lo que nos sorprendió fue que la que persona que nos atendió no sabía ni lo que era una SLL, en fin, que se hizo fotocopia de los papeles que yo llevaba para informarse (el mundo al revés), así que nos fuimos de allí igual que habíamos ido. Al menos esa noche, alguien dormiría sabiendo algo nuevo.


A los pocos días, estuvimos en el CADE (Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial) de San Juan de Aznalfarache, donde nos dijeron que un proyecto como el nuestro no podría acceder a las naves ni oficinas de la Fundación Andalucía Emprende, porque no éramos ni innovadoras ni tecnológicas... Y ese mismo día nos atendieron el la Oficina del Instituto de la Mujer de la misma localidad y nos dijeron que una idea como la nuestra no tendría futuro, porque empresas de ayuda a domicilio había muchas...


En ese momento ya, empezamos a tomar con seriedad esas palabras, y buscamos empresas que hubiera allí por esa zona,... razones no le faltaban, había tres. La idea de que aquel no era un buen lugar para nuestra empresa, era cada vez más firme.


Con este panorama, yo seguía buscando información y completando el plan de empresa, y con el apoyo abrumador que habíamos encontrado la verdad que tampoco le teníamos mucho apego... no nos costó ningún trabajo pensar el proyecto en otro municipio.


Entre tanto me llamaron del CADES (el curso de experto donde yo tenía tanto interés en entrar), y me dijeron que por mi situación de desempleo no podía entrar ya que solo era para personas ocupadas, y que me quedaba la primera en reserva que si alguien renunciaba, la siguiente era yo en entrar. 


A las dos semanas me llamaron, estaba dentro del CADES, no me lo podía creer. Empezaba con muchísima ilusión una experiencia nueva, donde conocería a personas relacionadas con el sector, de las que podía aprender mucho.

Esquema Plan de Empresa

PLAN DE EMPRESA


1. DATOS BÁSICOS DEL PROYECTO.
1.1 Nombre de Identificación del Proyecto.
1.2 Ubicación.
1.3 Fecha de Inicio.
1.4 Tipo de Sociedad.
1.5 Explicación Breve de la actividad a desarrollar.
1.6 Nº de trabajadores previstos.
1.7 Cuantificación, en líneas generales, de la inversión necesaria y su
financiación.
2. PROMOTORAS DEL PROYECTO.
2.1 Grado de Implicación futura al proyecto.
3. DESCRIPCIÓN DE LOS PRODUCTOS Y SERVICIOS.
4. PLAN DE PRODUCCIÓN.
4.1 Descripción Técnica.
4.2 Normativa.
5. ANÁLISIS DE MERCADO.
5.1 EL Mercado.
5.2 Identificación de la competencia.
5.3 Estudio de la población dependiente.
5.4 Estudio socio-económico de la población.
6. PLAN DE MÁRKETING.
6.1 Promoción/Comunicación.
7. ORGANIZACIÓN Y PERSONAL.
7.1Análisis y Descripción de los puestos de trabajo.
7.2 Especificaciones del puesto de trabajo.
7.3 Organización del Servicio.
7.4 Costes de Personal.
8. PLAN DE INVERSIONES.
9. PREVISIÓN DE LA CUENTA DE RESULTADOS.
10. FINANCIACIÓN PREVISTA.
10.1 SUBVENCIONES A LAS QUE PODEMOS ACCEDER.
11. VENTAS.
11.1 ESTIMACIÓN DE RESULTADOS.
12. CONCLUSIONES.

Buscando información para elaborar el Plan de Empresa.

Cuando nos dijeron que teníamos que hacer un Plan de Empresa, ni siquiera sabíamos lo que era. En Feansal, (Federación Andaluza de Sociedades Laborales), que es donde nos han asesorado desde el principio, nos facilitaron una plantilla de lo que era un Plan de Empresa.


Cuando nos encontramos con el documento en blanco, no sabía ni por donde empezar, en nueve puntos había que describir la empresa desde el nombre hasta cuantos trabajadores teníamos previsto tener, los gastos, los valores de la empresa, cosas que ni siquiera entendimos en un primer momento.


Empezamos a buscar cursos de formación, relacionado con la actividad que íbamos a desempeñar, y en Feansal, me hablaron de un "Curso de Experto en Dirección de Centros y Servicios de atención a personas en situación de dependencia", que en el año 2009, íba a comenzar su segunda edición.


Este curso se imparte en la Escuela de Economía Social que se encuentra en Osuna. Y en cuanto salieron las preinscripciones, en julio de 2009 me apunté. No sabía ni lo que me costaría, ni nada, solo sabía que ese curso lo tenían muy pocas personas y que yo si me quería dedicar a esto, tenía que tener esa formación.


Y esa ha sido la filosofía que hemos seguido desde que iniciamos el proyecto, formarnos, y buscar información, diariamente sobre la ayuda a domicilio, y la economía social.

Primeros pasos, nuevos conceptos

Tras la importante decisión de emprender, y por fin encontrar la actividad a la que dedicarnos, empezamos a dar nuestros primeros pasos.
Lo primero que hicimos fue visitar a Paco, y comentarle la noticia de que queríamos crear una empresa, y al decirle nuestra actividad y en que consistía, le soltamos: "vamos a ser una empresa de ayuda a domicilio", a lo que el nos respondió: "¿y eso que es?" y nosotras le contestamos "las mujeres que cuidan a las personas en sus propias casas". 
Y ahí se acabó nuestra primera definición de lo que era una auxiliar de ayuda a domicilio. Escueta, imprecisa... y poco más supimos explicarle. Y eso teniendo a la mejor de las profesionales en casa.
El con buen criterio nos dijo, que preparáramos un plan de empresa, y que nos enteráramos bien de lo que queríamos montar.


Yo lo tenía claro, una empresa de ayuda a domicilio. Pero ahora entiendo, que en ese momento me faltaban muchos datos, pero muchos...


Entraron en nuestra vida nuevos conceptos, ya no éramos desempleadas sino "emprendedoras", y teníamos que hacer un "plan de empresa" para demostrar la "viabilidad" de la empresa que cambió su nombre por "proyecto".


Conocimos más palabras nuevas CADE (Centro de Apoyo al Desarrollo Empresarial), SAD (abreviatura de Servicio de Ayuda a Domicilio), y otras que ya conocíamos pero no habíamos visto ninguna "subvenciones", ayudas a la creación de empresa y autoempleo...


Teníamos un largo recorrido por delante, aunque a nosotras nos comían las prisas por empezar a trabajar cuanto antes, y empezar a cobrar un sueldo digno... que fuera algo más que los 426 € de la ayuda familiar...

¿Qué hacemos con nuestra idea de crear una empresa?

Bueno ya teníamos claro que queríamos crear una empresa, ahora nos teníamos que centrar en el "¿a qué nos íbamos a dedicar?".


Marazul ya había tenido experiencia empresarial años atrás, eso fue uno de las claves por las que queríamos contar con ella. 


Y sabíamos que no queríamos dedicarnos al comercio, nuestros padres tuvieron una carnicería, cuando éramos pequeñas y no les fue bien. Y Marazul, también tuvo que cerrar sus tiendas.


Objetivo conseguido: al menos ya sabíamos que queríamos ser una empresa de servicios.


Yo, antes de quedarme en desempleo había trabajado en una empresa que prestaba servicios de intermediación financiera. Aquel trabajo me gustaba, era una forma de ayudar a gente que se encontraba asfixiada económicamente por la hipoteca y por otros préstamos personales, y nosotros conseguíamos que otro banco le metiera en una sola operación todos los préstamos por una cuota más pequeña al mes, pero durante mucho más años, hasta el máximo legal.


Eso me gustaba, pero luego recordé que eran más personas a las que no podíamos arreglar su situación, que las que firmábamos.


Ya íbamos perfilando lo que queríamos hacer, sabíamos que seríamos una empresa de servicios, y nos gustaba ayudar a los demás.


Y a partir de ese momento, nuestra madre entra a formar parte de la idea. Ella desde hace más de 10 años, cuidaba de las personas mayores, les daba apoyo, cariño, y sabía mantener la distancia precisa para distinguirse por su profesionalidad.


No era chacha, ni enfermera: era auxiliar de ayuda a domicilio. Es una labor tan noble y tan poco reconocida, y tan necesaria para las familias, que por fin encontramos a lo que nos queríamos dedicar.

Empezando por el principio

Hace casi dos años, tuve la genial idea de crear una empresa. Esto no pasó de la noche a la mañana, se me ocurrió mientras una persona nos hablaba en un curso, de emprender, pero de emprender en colectivo, y en economía social.

Mientras le escuchaba, en mi cabeza parecía haber saltado un resorte, y me vi creando una empresa, creando mi propio puesto de trabajo, estableciendo mis propios horarios, para conciliar mi vida familiar y laboral. Un futuro que se me prometía mejor, que el que estaba viviendo, mientras cobraba la ayuda familiar, (426 €) y asistía a cursos de formación para tener más opciones de conseguir un puesto de trabajo.

Cuando se terminó la charla inmediatamente, llamé a mi hermana, y le dije: "¡vamos a crear una empresa!, no sé de qué, ni con qué, ¡pero vamos a crear nuestra propia empresa!".
Al otro lado del teléfono, mi hermana escuchaba atónita, pensando que qué había desayunado yo esa mañana. Después llamé a nuestra amiga "Marazul", y se lo propuse también que formara parte de nuestra empresa. Las tres estábamos en desempleo, y no teníamos nada mejor que hacer.

Con el paso de los días, la idea se fue haciendo cada día más intensa, y solo estábamos en el principio: querer hacer algo diferente, a lo que habíamos hecho, buscarnos la vida de otra forma, crearnos nuestro propio puesto de trabajo.

Ahora teníamos que seguir con lo más importante, saber a que nos íbamos a dedicar, que íbamos a ofrecer a la sociedad con nuestra empresa.